Con este titular el Padre Jesús Alvarez comenta el evangelio de la Misa de mañana.La verdad es que me ha gustado mucho la idea de ver como en esa pena por la falta del vino en las bodas de Cana, a quién de nosotros no nos hubiera llenado de tristeza, Dios aprovecha, con su primer milagro, para dar mayor alegría.
Este suceso no es esporádico en la vida de los hombres. En muchas ocasiones, después de una gran Cruz, Dios da cierta alegría y paz donde ya se había perdido la esperanza. Y para que veas....mira este vídeo y comprenderás un poco como de un gran mal Dios saca un gran bien.
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